jueves, 21 de marzo de 2013

Escuela Marxista


CORRIENTE MARXISTA
El pensamiento marxista en Economía nace en el siglo XIX ligado al naciente movimiento obrero (sindicatos,grupos y partidos obreros) y a las corrientes de pensamiento anticapitalistas (socialismo utópico, “socialismo científico” o comunismo, anarquismo o comunismo libertario…) que se desarrollan en su seno y entre sectores intelectuales. Los planteamientos marxistas son algo más que una Teoría Económica, y constituyen “ una concepción del mundo” que intenta analizar la realidad de la sociedad capitalista desde varios puntos de vista convergentes (desde la Economía, la Historia, la Filosofía, la Sociología, la Política, la Antropología, etc.), aunque en general se reconoce que el núcleo de los planteamientos marxistas se encuentra en su análisis de la economía y en su concepción de la lucha de clases y el papel de ésta en la historia.
Esta interpretación de la economía y de la historia, fue acogida por las organizaciones de los trabajadores desde la segunda mitad del siglo XIX, llegando a ser el planteamiento hegemónico en éstas hasta finales del siglo XX. A diferencia de las otras corrientes que estamos estudiando, los planteamientos marxistas no nacieron de una clase que controlara la economía y el poder político, sino en una clase que tenía un papel subordinado.
En este sentido, sus concepciones económicas no se aplicaron en la práctica hasta que no se produce
el nacimiento de los Estados Obreros (Revolución Bolchevique, en 1917, Revolución China, en 1948, Revolución Cubana, en 1959, etc.).
Como las otras corrientes que hemos comentado, el marxismo nació en Europa, especialmente en los
países en los que el capitalismo estaba más desarrollado (Alemania, Inglaterra, Francia, Italia, Austria…), pero se extendió durante el siglo XX a todos los continentes y en todos ellos inspiró la creación de organizaciones revolucionarias y de movimientos revolucionarios que, en algunos casos, llevaron a estas organizaciones a la conquista del poder político.
En sus planteamientos económicos partieron de los que hicieron los economistas clásicos, aunque sus
análisis les llevaron a conclusiones muy diferentes.
Esta corriente económica tuvo una gran influencia también en el terreno académico y entre los intelectuales del siglo XIX y XX, incluidos sectores de la intelectualidad burguesa, escritores, artistas, etc.
En esta corriente destaca Kart Marx, del que esta escuela tomó su nombre y cuyos análisis son considerados como los fundamentos de esta doctrina. El marxismo, no obstante, no fue, ni es, un pensamiento monolítico, sino que en su seno se desarrollaron numerosas variantes (la socialdemocracia o reformismo, el leninismo o marxismo revolucionario, el estalinismo, etc.).
Marco histórico del surgimiento del Marxismo:
El marxismo nace y se desarrolla en la revolución industrial, que transformó en hegemónico al modo de producción capitalista, convirtiendo en subordinadas o marginales a las economías precapitalistas, provocando el nacimiento y el crecimiento de la clase obrera industrial.
En este marco se empezaron a generalizar las luchas de los trabajadores por la mejora de sus condiciones de vida (el primer sindicalismo). Estas luchas se fueron convirtiendo en un enfrentamiento de los trabajadores/as con la burguesía y el Estado burgués, lo que implicó el auge de las teorías socialistas y anarquistas, y el que se dieran las primeras luchas obreras por el poder político y económico (Francia 1830, Alemania 1848, nacimiento de la Primera Internacional –AIT- 1864, Comuna de París en 1871,..).
En este mismo marco, el colonialismo de la época mercantilista se va extendiendo a prácticamente todo el planeta (que pasa a depender de los principales países capitalistas europeos, primero, de los Estados Unidos y Japón y, después) hasta convertirse en el Imperialis mo de finales del XIX, principios del XX.
La corriente marxista, en el terreno económico, se preocupó fundamentalmente de:

1. Llevar a sus últimas consecuencias los planteamientos teóricos de los clásicos, especialmente la teoría del valor-trabajo, haciendo ver que los trabajadores son la única clase social imprescindible en la producción y la que crea la riqueza y el excedente (que le son robados legalmente).
2. Crear una Teoría Económica que permitiera interpretar el funcionamiento y el desarrollo de la economía capitalista, sus crisis, sus tendencias, etc.
3. Organizar a los trabajadores de todos los países, en base a la convicción de que la economía capitalista, a pesar de los “avances” que supone, no tiene futuro político y económico, y que debe ser sustituida por otra basada en la propiedad colectiva de los medios de producción (el socialismo).
Principales propuestas de la corriente marxista:
 1 Terminar con el capitalismo, que tiende a code la burguesía de retomar su poder) que evolucionaría hacia el socialismo y el comunismo aboliendo los privilegios, las clases sociales y el Estado.

2. “Expropiar a los expropiadores”, socializando los medios de producción que pasarían a ser propiedad colectiva.
3. Establecer un sistema económico, a nivel mundial, basado en los intereses de la mayoría (los trabajadores/as) a través de la “dictadura del proletariado” (democracia para la mayoría y represión de los intentos de la burguesía de retomar su poder) que evolucionaría hacia el socialismo y el comunismo aboliendo los privilegios, las clases sociales y el Estado.

4. Planificar la economía en las nuevas sociedades, controlando los mercados y los precios, el desarrollo económico, la distribución de la renta, etc., en función de los intereses de las mayorías.
5. Democratizar la economía y desarrollar la igualdad, buscando la satisfacción de las necesidades básicas de toda la población mundial.
Karl Marx (1818-1883)
Karl Marx, nacido en Alemania, es considerado el pensador que puso las bases
de la doctrina que tomó su nombre. Sus primeros trabajos fueron de carácter
filosófico, pasando rápidamente al terreno político y al estudio crítico de la historia
y de la Economía. En este último aspecto tuvo mucha importancia la ayuda e
influencia de su amigo y compañero de militancia revolucionaria Federico Engels
(inglés).
Su trayectoria política e intelectual le llevó a tocar muchos aspectos del conocimiento.
Escribió numerosas obras y artículos, sobre Filosofía, Historia, Política,
Sociología y Economía. Toda su actividad intelectual giró en torno a su actividad
como revolucionario.
Sus análisis parten de la Economía Clásica (la Economía Política). Sobre todo de los análisis de David Ricardo y de la ley del valor-trabajo, la que completa y somete a critica.
Sus posiciones y conclusiones son anticapitalistas y sus análisis son una síntesis de economía, historia,
sociología... formando una “concepción del mundo”, pero especialmente una concepción del nacimiento, desarrollo y fin del capitalismo.
Sus análisis, incluidos los económicos, son muy abstractos. Rechazó que existieran “leyes” económicas naturales, universales, inmutables y válidas para todas las épocas. Planteaba que cada modo de producción tiene sus propias “leyes”, que son determinadas históricamente y que son de carácter social, por lo tanto cambiantes y cambiables. Que esas “leyes” cambian según cambian las sociedades y son cambiadas por la acción de los grupos y clases sociales.
Su obra económica por excelencia es “El Capital”, publicada en 1867, aunque también son importantes
en el terreno de la Economía la “Contribución a la Crítica de la Economía Política” y otras muchas obras, artículos y folletos sobre economía, filosofía e historia.
En sus planteamientos asumió de manera explicita las posiciones de los trabajadores de la industria (el
proletariado industrial), aunque considera que la historia llevaría inevitablemente a la desaparición del capitalismo que daría lugar a una sociedad sin clases (el socialismo) en la que también desaparecería la clase obrera y todas las clases sociales.
Sus planteamientos teóricos pueden resumirse en:
1. Ley del valor-trabajo y plusvalía:
ƒ Las mercancías tienen valor de uso o utilidad (lo que es subjetivo) y valor de cambio (que es objetivo y proviene del tiempo de trabajo, “socialmente necesario”, que llevan incorporadas. Este planteamiento parte de la distinción entre valor de uso y de cambio, que ya hicieron algunos pensadores en la Antigüedad, como Aristóteles, y que retomaron los Clásicos, especialmente David Ricardo.
ƒ De todo lo que se incorpora a la producción, sólo el trabajo crea un nuevo valor, pues el “valor” de la
fuerza de trabajo (el trabajo que cuesta reponerla) es menor que el valor creado por la fuerza de trabajo. Esa diferencia es el origen del excedente, o sobreproducto social, que en la sociedad capitalista toma la forma monetaria de “plusvalía” (que resume beneficio, interés y renta) y que se la apropia el capital.
2. La producción es el eje y la base de la economía:
ƒ En la manera social de producir está incluida la apropiación (quién se queda con lo producido o cómo
se “distribuye” lo producido) y las relaciones sociales (es decir, las relaciones entre los grupos o clases sociales, que son de explotación y opresión en las sociedades de clase). Considera que en todas las sociedades se participa en la apropiación (o “distribución”) según como está organizada la producción.
ƒ Considera que la economía es siempre social, siempre es colectiva y condicionada por la sociedad, y
que no se puede buscar su lógica en supuestas “leyes naturales” o en el análisis del individuo. Considera que no hay leyes económicas validas universalmente.
3. Al capitalismo le interesa mantener el desempleo para mantener bajos los salarios (“ejército industrial de reserva”).
4. La “tasa de ganancia” (% de beneficio sobre la inversión total) es decreciente:
El capital intenta siempre incrementar la plusvalía. Para ello tiene tres caminos:
4.1. Reduciendo los salarios, pero hay un límite para esta reducción.
4.2. Ampliando la jornada de trabajo, lo que también tiene un límite.
4.3. Elevando la productividad del trabajo a través de la inversión en “capital fijo” (maquinaria, herramientas,
instalaciones, etc.): Esta forma de incrementar la plusvalía no tiene límite, pero al haber
cada vez más capital fijo por trabajador (es lo que se llama el aumento de la “composición orgánica
del capital”), disminuye la “tasa de ganancia” (el % de ganancia sobre el total de la inversión), pues
el capital fijo no produce plusvalía, sólo el trabajo humano produce esa plusvalía.
5. Tendencia lógica del capitalismo a la concentración del capital .
La caída de la tasa de ganancia hace que para mantener y aumentar la plusvalía, el capital tenga que invertir cada vez mayores volúmenes de capital, por lo que los pequeños y medianos capitalistas van desapareciendo, las grandes empresas tenderán a fusionarse, se crean grandes grupos de capital, etc.
6. En el capitalismo son inevitables las crisis económicas y la tendencia al estancamiento, lo que llevará polñiticamente a la destrucción del capitalismo (que será sustituido por el socialismo o comunismo): “La burguesía produce sus propios sepultureros”.
Estos planteamientos económicos marxistas están sustentados sobre otros planteamientos más generales, que podemos llamar filosóficos, que se han venido agrupando en el “materialismo” dialéctico e histórico:
7. Materialismo histórico
La característica básica de las sociedades es su economía, su “modo de producción”, que incluye:
ƒ Fuerzas productivas (fuerza de trabajo, herramientas, máquinas, conocimientos, tecnología, organización de la producción..).
ƒ Relaciones de producción (se dan entre las personas, agrupadas en clases sociales, en la producción).
Las fuerzas productivas tienden a crecer y crean nuevas realidades que chocan con las viejas relaciones de producción (por ejemplo, la industrialización termina con los restos del poder feudal). A medio plazo esas
“viejas relaciones de producción” terminan siendo sustituidas por otras nuevas y acordes con el desarrollo
alcanzado por las fuerzas productivas.
8. La existencia determina la conciencia (materialismo dialéctico): la conciencia humana nace de la situación social en la que vivimos las personas (y no al revés). Aunque como la situación social está basada en intereses contradictorios, de la misma situación nacen conciencias (representaciones de la realidad) diferentes.
Algunas de esas conciencias representan el conservadurismo y otras el “progreso”.
Ejemplo de la plusvalía:
Supongamos que un trabajador para producir un mueble utiliza únicamente un serrucho, un martillo, clavos, madera y
su propia fuerza de trabajo. El serrucho y el martillo incorporan a la producción una parte de su valor (desgaste y obsolescencia),
pongamos el equivalente a un 1% (1 hora). Los clavos yla madera se incorporan en su totalidad al mueble (20
horas). En el trabajo el carpintero incorpora 10 horas.
Capital Fijo: Valor (de reposición) Valor incorporado
100 hor a s 1 hora
100 horas 1 hora
Capital v a r i able:
20 horas 20 horas
6 ho r as 10 hora s
Total valor de la mesa: 32 horas
Algunas críticas al marxismo:
La planificación es más ineficiente que el mercado. La “libertad” económica es parte indisoluble de la Libertad.
La creatividad y el desarrollo económico provienen de la competencia y del afán de lucro.
El marxismo como teoría es hegelianismo. Menospreció la capacidad de reacción del capitalismo.
Algunos economistas marxistas:
Carlos Marx (1818-1883).
Federico Engels (1820-1895).
Rosa Luxemburgo (1870-1919).
V.I. Lenin (1870-1924).
Eugeni Preobrazhenski (1886-1937).
Samir Amín.
Ernest Mandel (1920-1995).
Nikolai Bujarin (1888-1938).
El trabajador trabaja 10 horas para
hacer el mueble, pero para reponer su
fuerza de trabajo consume productos
que han sido elaborados, por otros
trabajadores, en, por ejemplo, 6 horas.
El excedente es de 4 horas, es decir,
consumiendo productos que se
producen en 6 horas, el trabajador
puede trabajar 10 horas.
En el sistema capitalista, por ejemplo,
el capital paga un salario que
permite comprar productos elaborados
en 6 horas, y se apropia de ese excedente
de 4 horas (eso es la plusvalía).

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